Hoy en día
el tipo de educación que se entrega a los alumnos sigue un modelo academicista
el cual tan solo busca entregar conocimientos a los alumnos (a modo de
cátedra), sin incentivar la creatividad ni el pensamiento crítico. Varias teorías han sido generadas a modo de revertir esta situación, pero ninguna de
ellas ha causado mayor impacto en la sociedad. En Chile no se ha logrado un cambio significativo.
El modelo
educacional actual no proporciona las herramientas necesarias para que en los
alumnos se produzca un cambio real de pensamiento ni de mente, muchas veces son
evaluados con pruebas estandarizadas, las cuales solo buscan medir los
conocimientos de manera mecánica, sin que los alumnos demuestren sus talentos o lo que realmente aprendieron.
Por lo tanto la educación actual proporciona pocas herramientas para cambiar lo
que está mal. Los contenidos entregados no van más allá de lo que está en los libros de texto, lo que produce el aprendizaje o la recepción de contenidos alejados de la realidad, los cuales muchas veces serán olvidados luego de la prueba.
Si bien
una de las funciones de la educación es ser una herramienta para cambiar la sociedad, se tiene
que partir por cambiar la mente de los ciudadanos, si la educación no logra
este cometido, la sociedad simplemente no cambiará, porque “La sociedad no
puede ser mejor que sus ciudadanos”. Lo cual me lleva a concluir que solo con una mejora en la educación podemos lograr la sociedad soñada.
La educación debería cambiar en ciertos aspectos, debería ser más abierta a los cambios tecnológicos, debería ser más inclusiva y debería aceptar todos los talentos y las diferencias de sus alumnos, si un estudiante tiene dotes artísticos la escuela y por lo tanto la educación, debería ser la que ayudara al alumno a desarrollar sus talentos, también si un alumno tiene problemas de aprendizaje, no puede ser medido como los demás, pero tampoco puede ser dejado a parte, no puede ser discriminado, ni puede quedar rezagado No podemos permitir que la educación se estanque y que no ayude a la sociedad.
La educación debería estar dispuesta a cambiar los aspectos malos de la sociedad, debería ser capaz de generar cambios de mente importantes en los ciudadanos, debería crear oportunidades de cambio, ya sea movilidad social o que los alumnos tengan mayores oportunidades de desarrollarse como ciudadanos de bien en el contexto social en el que se encuentran inmersos.
Generar ciudadanos dispuestos a crear un mundo mejor, es una de las funciones de la educación. Cuando estamos inmersos en una sociedad buena, todo es mejor, por lo tanto la educación es la mejor herramienta que poseemos. Como futuros docentes, es nuestra función estar conscientes de la fuerza de una buena educación para todos los estamentos de la sociedad. Debemos ser conscientes de que nuestra función muchas veces despreciada por algunos puede generar la diferencia que cambiará el futuro de Chile y del mundo. Como futuros docentes debemos saber que la educación si puede cambiar mentes, si se tiene el modelo adecuado y por su puesto si los educandos están dispuestos a que se produzcan cambios en ellos.
La mayor parte de nuestra vida nos encontramos bajo un sistema educativo predeterminado por el Ministerio de Educación, el que se debe encargar de entregar todas las herramientas necesarias para que un alumno pueda desenvolverse a cabalidad independiente de lo que el realmente quiera para su futuro. Los docentes durante este período son los principales encargados de entregar los contenidos necesarios en lo relacionado al ámbito educacional y a la vez fomentar la buena convivencia y la armonía en una sala de clases tanto en relación maestro alumno y alumno con alumno, sin embargo, uno de los grandes puntos que es comúnmente dejado de lado la creatividad, factor que debería tener más relevancia de la que se le da hoy en día.
